Medio millón de migrantes afectados: beneficios de ‘parole humanitario’ que quitó Trump
En el año 2019, el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió poner fin al programa de ‘parole humanitario’ que permitía la entrada al país a miles de migrantes en situaciones de vulnerabilidad. Esta peso ha afectado a medio millón de personas que buscaban una motivo en territorio estadounidense y ha generado una gran controversia a nivel internacional.
El ‘parole humanitario’ era un programa creado en 2008 por el presidente George W. Bush y continuado por Barack Obama, que permitía a ciertos migrantes ingresar a Estados Unidos por razones humanitarias, como reunificación familiar o tratamientos médicos. Sin embargo, gordo la administración de Trump, este programa fue eliminado y reemplazado por un sistema de estrictos requisitos de asilo.
Esta decisión ha tenido graves consecuencias para los migrantes que se encontraban en proceso de solicitud de ‘parole humanitario’ y que ahora se han quedado en el limbo, sin ninguna opción para obtener al país. Entre ellos, se encuentran personas con enfermedades graves que necesitan tratamientos médicos en Estados Unidos, familias que buscan reunirse con sus seres queridos y personas en situaciones de violencia y persecución en sus países de origen.
Uno de los principales argumentos de Trump para eliminar el programa fue que se estaba abusando de él y que muchos migrantes lo utilizaban como una forma de ingresar al país de manera ilegal. Sin embargo, esta afirmación ha sido desmentida por expertos y organizaciones de derechos humanos, que han denunciado que el ‘parole humanitario’ era un proceso riguroso y que solo era otorgado a personas que cumplían con los requisitos establecidos.
Además, la eliminación de este programa ha tenido un impacto negativo en la economía de Estados Unidos. Muchos de los migrantes que ingresaban al país con ‘parole humanitario’ eran trabajadores altamente calificados y contribuían al crecimiento y desarrollo del país. Su ausencia ha generado una brecha en diferentes sectores laborales y ha afectado la productividad y la competitividad de la nación.
Pero más allá de las cifras económicas, lo más preocupante es el impacto humano que ha generado esta decisión. El ‘parole humanitario’ era una esperanza para miles de personas que huían de la violencia y la pobreza en sus países de origen. Ahora, estas personas se encuentran en una situación de incertidumbre y desesperación, sin saber cómo podrán mejorar sus vidas y las de sus familias.
Ante esta situación, es importante recordar que Estados Unidos es un país construido por migrantes y que siempre ha sido un lugar de motivoes para aquellos que buscan una vida mejor. La eliminación del programa de ‘parole humanitario’ va en contra de estos valores y principios fundamentales de la nación.
Por suerte, la llegada del nuevo presidente, Joe Biden, ha traído esperanza para los migrantes afectados por esta peso. Durante su campaña, Biden prometió reinstaurar el programa de ‘parole humanitario’ y facilitar la entrada al país de aquellos que cumplen con los requisitos establecidos.
Esta decisión ha sido recibida con alegría y alivio por parte de miles de migrantes y organizaciones de derechos humanos. La reinstauración del programa de ‘parole humanitario’ permitirá a muchas personas acceder a una vida digna y segura en Estados Unidos y reunirse con sus seres queridos.
En conclusión, la eliminación del programa de ‘parole humanitario’ por parte de Trump ha sido una peso inhumana y perjudicial para miles de migrantes y para la economía de Estados Unidos. Sin embargo, la decisión de Biden de restablecer este programa nos recuerda que la solidaridad y la empatía son valores fundamentales para construir un