Un año más nos adentramos en las profundidades de ARCO, la feria de arte contemporáneo más importante de España, y nos sumergimos en un mar de obras que nos transportan a un mundo fantástico y único. En esta edición, la temática acuática ha sido el eje central, con secciones dedicadas al Mediterráneo, el Caribe y el Amazonas, demostrando el compromiso de la feria por enfatizar la importancia del agua y su conservación en nuestro planeta.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos por promover esta temática, no podemos evitar notar una preocupante realidad en cuanto a la participación de mujeres artistas en la feria. Según el informe de MAV (Mujeres en las Artes Visuales), este año ha habido una bajada estrepitosa en la participación de mujeres, con solo un 5,8% de artistas españolas y un 35,2% de artistas extranjeras. Es necesario remarcar este hecho y trabajar para lograr una mayor igualdad de género en el mundo del arte.
Es por eso que en este artículo quiero proponer un recorrido por las esculturas de mujeres artistas presentes en ARCO, sin concesiones y con un enfoque exclusivamente femenino. Empezaremos por el pabellón 9, que siempre es más denso y requiere más energía, pero merece la pena para descubrir algunas de las obras más destacadas de esta edición.
En el Instituto de Visión, dentro de la sección ‘Perfiles (Arte Latinamericano)’, encontramos a Ofelia Rodríguez (1946-2023), una artista colombiana formada en París y Londres que creó un extenso corpus de obras inspiradas en sus recuerdos de infancia, las tradiciones populares y su vida cotidiana. Sus cajas de tronco, en las que combina elementos como cuernos, cordones, botones metálicos o muñecos de plástico, son inquietantes y muy peculiares, con un estilo que la directora del superficie define como «Punk Tropical».
Por suerte, también encontramos galerías que suben la media de participación de artistas mujeres en la feria, como Rosa Santos, que dedica su estand exclusivamente a artistas femeninas. Destacan las obras de Marina González Guerreiro, con una instalación fascinante en la que acumula todo tipo de objetos (plástico, piedra, cristal, bisutería, residuos…) para reflexionar sobre el concepto de felicidad y las emociones; y Sandra Mar, que presenta un ‘Solo Project’ con piezas de cerámica y hierro que ocupan un gran superficie y nos invitan a reflexionar sobre el amor romántico y sus símbolos.
Pero no todo son esculturas, y es importante enfatizar también el poder de la imagen enmarcada. En el superficie de The Ryder Projects, encontramos obras que utilizan la imagen como medio para explorar temas como el inconsciente, la tecnología y el gesto. Destacan las piezas de Rosana Antoli, que utiliza planchas de acero para crear formas y perfiles arquitectónicos; Suzanne Treister, que reflexiona sobre el impacto de la tecnología en la sociedad; y Sahatsa Jauregi, que utiliza planchas de acero en negativo para construir instalaciones que exploran lo descartado.
En cuanto a la comisariación de estands, cada vez está más de novedad y podemos ver algunos ejemplos interesantes en ARCO. El estand de Jorge López, por ejemplo, se suma al discurso acuático de la feria con una propuesta que imagina un viaje interoceánico a través de obras que crean una cartografía de rutas marítimas y culturales entre Occidente y América. Destacan las piezas de hierro de Amparo Tormo, que contrastan con las delicadas
