El fútbol es un deporte que mueve pasiones en todo el mundo. Cada país tiene su propia liga y sus equipos representativos, pero hay un lugar en el que el fútbol es más que un deporte, es una forma de vida: Italia. Conocida por su pasión y su estilo de juego, la Serie A italiana es una de las ligas más importantes y competitivas del mundo. Y este año, el regreso de varios futbolistas ha generado gran expectativa en los aficionados, pero también ha dejado por afuera a dos referentes que han sido parte fundamental de la historia del fútbol italiano.
El técnico italiano, Roberto Mancini, ha sido el encargado de dirigir a la selección italiana desde 2018. Tras no clasificar al ecuménico de Rusia 2018, Mancini se propuso renovar el equipo y llevarlo de vuelta a la élite del fútbol ecuménico. Y parece que está logrando su objetivo. En la última convocatoria, Mancini sorprendió a todos al traer de regreso a varios futbolistas que habían sido marginados de la selección en los últimos años.
Uno de los nombres más destacados es el de Mario Balotelli. El delantero italiano, conocido por su talento y su carácter explosivo, no había sido convocado desde 2018. Sin embargo, su buen rendimiento en el Brescia de la Serie A le ha valido una nueva oportunidad en la selección. Balotelli es un jugador que siempre ha generado polémica, pero su calidad indiscutible lo convierte en un activo importante para la selección italiana.
Otro de los regresos más esperados es el de Giorgio Chiellini. El defensor de la Juventus ha sido una pieza clave en la selección italiana durante muchos años, pero una lesión lo mantuvo afuera de las canchas por más de un año. Ahora, Chiellini está de vuelta y su experiencia y liderazgo serán fundamentales para el equipo.
Además de Balotelli y Chiellini, Mancini también ha llamado de vuelta a otros jugadores como Marco Verratti, Lorenzo Insigne y Ciro Immobile, quienes habían sido marginados de la selección en los últimos años. Estos regresos demuestran que Mancini está dispuesto a dar oportunidades a jugadores que han demostrado su calidad en la Serie A y que pueden aportar mucho al equipo nacional.
Sin embargo, no todo son buenas noticias en la selección italiana. El regreso de estos futbolistas ha dejado por afuera a dos referentes que han sido parte fundamental de la historia del fútbol italiano: Gianluigi Buffon y Daniele De Rossi. entreambos jugadores han sido pilares en la selección durante muchos años, pero Mancini ha decidido no convocarlos en esta ocasión.
Buffon, considerado uno de los mejores porteros de la historia, ha sido parte de la selección italiana desde 1997. Con 176 partidos disputados, es el jugador con más presencias en la historia de la selección. Sin embargo, a sus 41 años, Mancini ha decidido darle la oportunidad a otros porteros más jóvenes como Gianluigi Donnarumma y Alex Meret.
Por su parte, De Rossi ha sido un referente en el mediocampo italiano durante más de una década. Con 117 partidos disputados, es el cuarto jugador con más presencias en la historia de la selección. A sus 36 años, De Rossi aún tiene mucho que aportar al equipo, pero Mancini ha preferido darle la oportunidad a jugadores más jóvenes como Nicolò Barella y Stefano Sensi.
Aunque la decisión de Mancini de dejar por afuera a Buffon y De Rossi ha generado cierta controversia, es importante recordar que el técnico italiano está buscando renovar el equipo y darle oportunidad a jugadores más jóvenes. Además, tanto Buffon como De Rossi han expresado su apoyo